Este libro reúne las aportaciones de reconocidos especialistas en el campo de los estudios de historia agraria de la Península Ibérica, que analizan cómo se concretó en Portugal y España el proceso de modernización de su agricultura a lo largo del siglo XX. Los estudios están enfocados hacia el periodo que transcurre entre el fin de los años cuarenta y comienzos de los setenta, cuando se expandieron los modelos de crecimiento económico y bienestar social que marcaron al mundo occidental en los años de posguerra.