Ana Shirley acaba de graduarse y se incorpora a su primer trabajo: durante los próximos tres años dirigirá el Instituto Summerside, lejos de su hogar y su prometido. En las cartas que le escribe le habla de las rencillas que su presencia suscita en la familia más prominente del pueblo, el día a día con sus ancianas caseras y su estricta ama de llaves o la conmovedora relación que establece con una de sus alumnas.