«Nuestros objetos cuentan nuestras historias». Bajo esta premisa, Gabriela Hens propone una reflexión sobre el papel de los instrumentos, hábitos y percepciones de nuestro mundo circundante. A partir de tres objetos nos invita a repensar cómo los habitantes de la ciudad nos relacionamos con los animales, las plantas y el aire que respiramos, es decir, con todo lo que es más-que-humano. Estos elementos que ella selecciona se introducen a través de relatos personales que tienen que ver con lo cotidiano en su vida y su infancia, y nos asegura que podrían haber sido muchos otros, subrayando así la prevalencia del cómo miramos sobre el qué miramos.
Lonchas, correas y tamagotchis es un texto que nos urge a mirar de otra manera los dispositivos que nos rodean y, a través de ellos, volver la mirada sobre nosotros mismos, entendiéndonos como parte de todo el entresijo de relaciones e interdependencias que llamamos naturaleza.