Jordi Sierra i Fabra aborda en esta novela, con empatía y complicidad, las dificultades y los desafíos de la adolescencia, revelando una nueva perspectiva sobre el acoso escolar y la salud mental en los jóvenes. Elisa tiene quince años y muchos complejos. Sufre de sobrepeso, es bajita y no está a gusto ni con su pelo ni con sus labios tan finos; se ve a sí misma fea y desagradable. Hace tiempo que asumió que su vida sería solitaria y sin amigos, que nunca podrá ser como otras chicas del instituto: algunas son más populares que otras, algunas son menos crueles con ella, pero todas son delgadas y siguen un patrón físico que las hace invisibles al acoso que tanto atormenta a Elisa. Un día conoce a Yolanda, una chica que es como a Elisa le gustaría ser: no solo es guapa, alta y delgada, sino extrovertida y libre, incluso temeraria ante el peligro. La amistad con Yolanda, quien oculta un gran secreto, cambiará la vida de Elisa para siempre.