La trayectoria política e intelectual de la llamada «Generación del 14» viene definida por la defensa del liberalismo. En general, ha definido a esta Generación como la superadora del «espíritu» del 98, en pos de la modernización de la sociedad española. A sus componentes les uniría la crítica al régimen de la Restauración, la denuncia de sus usos e inmovilismo políticos. Sin embargo, el período de entreguerras (1919-1939) se caracterizó en Europa por la crisis del Estado Liberal de Derecho. La amenaza revolucionaria acentuó el miedo a los peligros de la democracia en una sociedad española donde las clases medias y las instituciones civiles eran débiles. De ahí la evolución política e ideológica de algunos de los miembros de esta «Generación».