Desde que era niña, Marta ha soñado con acompañar a su abuelo avisitar los principales monumentos de Eduardo Chillida que hayrepartidos por toda España. Al morir su abuelo, Marta decide hacerleun homenaje cumpliendo su sueño y convirtiendo la contemplación de las esculturas de Chillida en distintas etapas de un viaje inolvidable.nesta novela gráfica, el dibujante David Marto nos invita a descubrirla obra de Chillida a través de los ojos de una joven estudianteenamorada de la obra del gran escultor vasco.