Lamar Odom es sin lugar a dudas el "enfant terrible" de la reciente historia de la NBA. Hijo de un padre ausente y drogadicto y una madre que murió muy joven de cáncer, tuvo que abrirse camino en el barrio neoyorquino de Queens. En estas reveladoras y turbulentas memorias, Lamar Odom no solo da cuenta de su periplo en el mundo del baloncesto, sino también de su reverso más oscuro.