La teoría general de la libertad de Marx es desarrollada por éste en un discurso que integra diversos puntos de vista: antropológico, histórico, político, económico, etc. La libertad no es reducible a simple consideración socio-histórica, ni tampoco a las categorías de la necesidad. Marx propugna como característico de la libertad la autorrealización del hombre en el ejercicio de sus poderes propios, asumiendo a la vez la concepción materialista del control o dominio sobre las condiciones de vida naturales y sociales. Fin (autorrealización) y medios (control, dominio) no son concebidos separadamente.