El 7 de junio de 1640, Barcelona fue escenario de una revuelta popular que acabó con la vida de varios ministros de Felipe IV. A partir delestudio de un amplio elenco de fuentes impresas y manuscritas demediados del siglo XVII, este libro ofrece un análisis pormenorizadode la lucha que se desencadenó en la Monarquía de España durante ladécada de 1640 por controlar la representación de aquella insurrección popular.